Amante

Amigos:

No es fácil hablar de un trío cuando ni siquiera se sabe hablar de dos. Desde hace rato el Ego y las maletas repletas de historias cubiertas de telarañas, se encargaron de colocar el cuchi cuchi en un recipiente con hielo. Más una tormenta de estenuantes compromisos especializaron la excusa como forma de convivir. Por otro lado, el callar por temor a que te dejen y, la imprudencia de haber permitido que los llantos de las crias estropearan la intimidad, es el guión de una película muy repetida, un poco larga y tediosa que, sugiero, seas tu quien le coloque el título.

Sin embargo, la película sería imcomplenta si no existiera el tercer personaje, el intruso, el quitapareja y cuantas cosas denigrantes salen de un decreto de amor eterno herido. Otros los llaman Amante (el o la amante es de tu elección) pero, de algo puedes estar seguro, llámese como se llame, son estupendos nombres que debe recordar el que está leyendo éste escrito para cuando tenga una crisis sentimental y ¿sabes por qué? porque ésta primera figura en el escenario, es muy inquieta y diría que muy directa, porque tiene en sus genes una vaina muy escasa entre dos personas que deciden estar juntos, la verdad.

Amante, cuando menos lo espera, recuerda que la fidelidad absoluta es un cuento de camino relatado por unos ingenuos hasta que uno de ellos decide colocar las cosas en su sitio. Que las razón y la lógica son para asegurar la tranquilidad pero, son los sentimientos, lo que hace trascender la comunión entre dos. Que hubo mucho esmero en ser atractivo pero poco auténtico. Y miren amigos...que cuando se comienza a hablar de espiritualidad es porque el demonio tomó el control de la relación. Les digo algo... Amante es muy, pero muy, parecido a los instintos sensuales de Venus y Marte, que son adictos a la pasión y son de un divertido...!

Este temido protagonista siempre esta ahí sigiloso para que, en el menor descuido, se le atraviesa a la moderna mujer imaginándose amor del bueno a través de sus tetas plásticas y al macho empeñado en tener un edén presumiendo que la carne de hombre es débil. Aquí nace parte interesante de la película cuando lo que estaba metido el el baúl comienza a destaparse y miren cómo vienen los lamentos...! Verdades y medias verdades. Egos y mas egos destrozados maldiciendo a Amante para no tocar la realidad de los dos y, para colmo, viendo los ojos del hijo y, cual lamento de una canción egipcia, le dicen "todo lo he aguantado por ti".

Entonces, llegó el momento que le endosaron al temor y al tiempo para que se encargaran de aclarar la verdad. Que desde hace rato la unión no es tal al menos que la obligación lo exigiera. Que el almanaque de Amante, jamás será un requisito cuando la necesidad de afecto en uno de los integrantes de la relación así lo requiera. Que la soledad es mala consejera pero cuando se siente teniendo "pareja" es verraca.

Solamente basta una pasión fresca y sonriente acompañado de una pícara ilusión para invitar a sentir que todavía hay vida. Que ese intrépido invasor con impaciencia y tesón, decidió quitar el hielo que cubría ese grito desesperado pidiendo amor .

Pero como toda película tiene un final, Amante, cual vagabundo que padece de las mismas emociones llega, se divierte y se va para que aquellos, que se confundieron alguna vez, vean cual es su verdad y decidan con gallardía el camino a tomar. De repente éste clarísimo invasor se queda algún tiempo pero, de seguro, mañana cuando el mundo de la vuelta la película se repetirá, al menos que aprendiera la pedagógica lección.

Que entiendas que el amor no es compromiso, no es tiempo, no es espacio, no tiene forma, sencillamente, es sentir. Que a pesar de que quieran meterlo en el intrincado mundo terrenal jamás dejará de ser un misterio. Que el amor no es degradarte para complacer ni es una condena para dejar de ser tu; al contrario, el amor es la gran obra que te da la hermosa oportunidad de ser tu mismo.

Chao

Los quiero.

04143282323